CLUB DE TENIS, HOTEL PUENTE ROMANO, MARBELLA, MÁLAGA. (30/6/2012).
Después de la polémica suspensión del concierto fijado para este día en Tenerife, según la productora por el encarecimiento del precio del transporte del escenario y según la organizadora del tour por una venta de entradas inferior a lo deseado, la fecha se recuperó una semana más tarde en Marbella, para celebrarse en el Club de Tenis de un lujoso Hotel. Era lo más parecido a uno de esos conciertos privados que últimamente tanto le gustan (económicamente hablando) a Sting. Si te sobra un millón de euros es probable que consigas que Sting cante en la boda de tus hija.
El Hotel Puente Romano ha tirado la casa por la ventana en esta temporada estival, Montserrat Caballé y Nikolay Baskov fueron los encargados de dar el primer concierto el pasado 23 de junio, el siguiente fue el de Sting y después llegarán los de Gloria Gaynor, Kathy Sledge, Nile Rodgers and Chic, Bryan Ferry y Chaka Khan. Al celebrarse en el exclusivo Club de Tenis de un lujoso Hotel y al tener tan sólo una capacidad para 2.600 espectadores, ese carácter tan íntimo parece que es lo que justifica que el precio de las entradas se encuentre entre los 100 y los 280 euros. El concierto de Sting tuvo poco más de veinte días para intentar despachar todas sus entradas, finalmente se quedaron unas 300 sin vender.
En un escenario muy rudimentario Sting y su banda se encontraron con la gente Vip marbellí (¡no podía faltar Gunilla Von Bismarck entre ellos!) y con un nutrida mayoría de extranjeros pasando unos días de relax en la Costa del Sol. Era la segunda ocasión que Sting tocaba en la provincia de Málaga (la otra vez fue en 1996) e hizo esfuerzos por hablar en español, aunque en un momento irónicamente preguntara al público sí allí había alguien que lo hablara. A pesar de la profesionalidad de todos los músicos, de la perfecta ejecución de todos los temas, de la variada elección de temas de sus 35 años de carrera (el concierto de Marbella repitió idéntico repertorio que el interpretado un día antes en Oeiras) al concierto le faltó alma.
No es de mucha ayuda para un concierto de rock que todo su público esté sentado y que únicamente rompa el protocolo en momentos muy puntuales, sobre todo a partir de los bises finales con “Desert rose” a la cabeza, y que muestre desdén por temas tan maravillosos como “Demolition man”, “End of the game”, “The hounds of winter” o “Heavy cloud no rain”, aunque obviamente ninguno de ellos suelan aparecer en los recopilatorios tipo “The very best of”. Es una terrible ironía que la gente que tiene el poder adquisitivo para ver una actuación tan íntima como ésta no tenga la capacidad (mayormente por desconocimiento) de disfrutarla como se merece. La primera parada de la gira española de Sting en un Hotel marbellí (algo inimaginable hace algunos años) y la segunda un día después en un Festival Tecnorock en la isla de Ibiza. ¿Qué hace Sting codeándose con gente como David Guetta, Tïesto, Fatboy Slim, Wally López, DJ Pippy, DJ Luciano o DJ Fonsi Nieto?. Sinceramente, no tengo la menor idea.
SETLIST:
All this time / Every little thing she does is magic / Englishman in New York / Seven days / Demolition man / I hung my head / Heavy cloud no rain / Driven to tears / Fields of gold / Message in a bottle / Shape of my heart / Love is stronger than justice (The munificent seven) / The hounds of winter / End of the game / Never coming home.
ENCORES:
Desert rose / King of pain / Roxanne / Every breath you take / Next to you.
MÚSICOS:
Sting (Voz y bajo), Dominic Miller (Guitarra), David Sancious (Teclados), Peter Tickell (Violín eléctrico y mandolina), Vinnie Colaiuta (Batería) y Jo Lawry (Coros).
AUDIENCIA:
2.300 espectadores.
[...Continuará]
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