jueves, 9 de agosto de 2012

LA HISTORIA DE...


EL CONCIERTO DE LOS 1.000 AÑOS

En julio de 1993 para conmemorar el año Xacobeo tuvo lugar en La Coruña un Festival musical que bajo el nombre de “El concierto de los mil años” reunió a un plantel irrepetible de veteranísimos artistas con algunos otros no tan veteranos pero igualmente influyentes. Alguien con cierto ingenio y con mucha sorna explicó que el nombre del Festival se debía a la suma de las edades de todas las leyendas contratadas con un presupuesto de 200 millones de pesetas que ya entonces había dado mucho de sí. En el Estadio Riazor se habilitó un escenario de 80 metros de largo, 25 de ancho y 20 de alto con 200.000 voltios de sonido y 1.000.000 de watios de luz por el cual desfilarían una pléyade de músicos francamente impresionante: Chuck Berry (66), Bo Diddley (64), John Mayall (59), Jerry Lee Lewis (57), Wilson Pickett (52), Bob Dylan (52), Eric Burdon (52), George Benson (50), Ray y Dave Davis de los “Kinks” (49 y 46), Neil Young (46), Robert Plant (44), Sting (41) y Chris Isaak (37). La mayoría de ellos aún hoy en activo, salvo Pickett y Diddley que fallecieron en 2004 y 2008 respectivamente. Pudo haber sido mucho más grande porque no se llegó a un acuerdo con Van Morrison, la Velvet Underground, James Brown y Bryan Ferry, a pesar de tanteárseles. Una triste ausencia fue la de Gary Moore (fallecido en 2011) que tuvo que cancelar su participación, aquejado de una otitis, siendo sustituido en el último momento por George Benson. Durante tres días este Festival recibió la visita de 80.000 personas.

JUEVES, 8 DE JULIO DE 1993

CHRIS ISAAK:

Ni el mismo entendía que pintaba en ese Festival rodeado de tanta vieja gloria, fue el encargado de abrirlo y también el único que concedió una rueda de prensa a los medios. Impecablemente vestido con un traje gris y aprovechándose de esa estética años 50 a la que se agarra, Isaak divirtió a los presentes con un concierto a ratos desenfadado, a ratos emotivo, que contó en su parte final hasta con un corrido mexicano. Se puede decir que aprovechó inteligentemente su oportunidad, era la primera vez que actuaba en nuestro país y se encontraba en su mejor momento de popularidad con el disco “San Francisco days” y el público conocía de sobra temas como “Blue Hotel”, “Wicked game” o “Blue spanish sky”.


GEORGE BENSON:

En calidad de sustituto del nuevo bluesman Gary Moore, a Benson no se le pusieron muy fáciles las cosas a pesar de derrochar simpatía y de ofrecer un concierto voluntarioso. Con una llamativa chaqueta roja trató de defender como pudo los temas más conocidos de su larga trayectoria, “Give me the night”, “On Broadway” o “Singing the blues”, pero su particular fusión de estilos como el soul, el jazz o el funk no parecía muy del agrado de un público que mayoritariamente esperaba las actuaciones de Neil Young y Sting. Su actuación no sobrepasó los 40 minutos y fue de lo menos valorado de todo el Festival.


NEIL YOUNG + BOOKER T. & THE MG’S:

El rockero canadiense se dejó acompañar esta noche por la banda de rhythm & blues que lidera el célebre teclista Booker T. Jones, que además incluía en su nómina al extraordinario guitarrista Steve Cropper. Young durante hora y media se centró en presentar temas de su último trabajo, “Harvest moon”, alternándolos con clásicos de su andadura con Buffalo Springfield (“Mr. Soul”), con Crosby, Stills, Nash & Crosby (“Helpless”) o en solitario (“Rockin’ in the free world”). La guinda final la puso una sorprendente versión del “All along the watchtower”, de Dylan (que tocaría al día siguiente curiosamente también este tema). A pesar de algunos fallos de sonido, una actuación verdaderamente memorable.


STING:

Los compromisos de Young no le permitieron adelantar su actuación para así poder regresar esa misma noche a Londres. Sting actuó finalmente pasada la 1 de la madrugada con lo cual hubo las lógicas deserciones. Fue el que cobró un caché más abultado (24 millones de pesetas) y su actuación resultó algo deslucida en comparación con el gran triunfo cosechado un rato antes por Neil Young. Acompañado por tres únicos músicos, Sting derrochó carisma y profesionalidad, en su sólido repertorio brillaban temas nuevos como “If I ever lose my faith in you”, “Fields of gold” o “Shape of my heart”, junto a clásicos policiacos del calibre de “Driven to tears”, “Every little thing she does is magic” o “Roxanne”. La gran sorpresa la pondría una inesperada y magistral versión del “A day in the life” de los Beatles. Unas semanas más tarde Sting recorrería ampliamente la geografía nacional dando 12 conciertos. Esta primera jornada había contado con más de 20.000 espectadores.

VIERNES, 9 DE JULIO DE 1993

THE KINKS:

El orden se alteró y en vez de abrir la velada John Mayall (que sería el último en aparecer) como estaba planificado fueron los hermanos Davies los encargados de hacer que el público entrase en situación. No les costó demasiado, dejando claro que después de casi 30 años como grupo aún les quedaba mucho por decir. No fue así, tres años más tarde se separarían definitivamente y el álbum que presentaban ahora, “Phobia”, se convertiría en un testamento musical muy honroso. Nadie sabía entonces nada de todo esto y los Kinks pusieron patas arriba el estadio con clásicos como “Lola”, “All day and all of the night” y “You really got me”.


BOB DYLAN:

Se mostró como siempre esquivo (llegó por carretera desde Gijón donde había actuado, no se relacionó con el resto de músicos en el catering ni se le vio paseando por la ciudad) y poco complaciente con su público (no saludó ni al principio ni al final de la actuación y lo más que esbozo fue una especie de sonrisa en una ocasión). Sin embargo Dylan salvó los muebles y su actuación convenció a sus fieles. Entre algunos aislados temas de su último trabajo, “Good as I’ve been to you” tocó temas de sobra conocidos por todos como “The man in me”, “Just like a woman”, “All along the watchtower” o “Mr. Tambourine man”, que aún así podía llevar varios minutos identificar. Lo más sorprendente, una versión de Joan Baez (“Little Moses”) y un guiño al público español (“Boots of spanish leather”). “It ain’t me, baby” puso punto y final a hora y media de actuación. Dylan que tenía que haber sido el cabeza de cartel había anticipado su actuación para no aparecer en las pantallas de video.


ROBERT PLANT:

A las 23’50 de la noche salió el ex–líder de los Led Zeppelin, acompañado por una banda de cinco músicos, con el extraordinario guitarrista Francis Dunnery (que acababa de cerrar su etapa como líder del grupo “It Bites”) a la cabeza. Lo que parecía que iba a ser una actuación de inspiración hinduista se convirtió en todo un concierto de rock duro que demostró la solidez de la banda de Plant y la calidad de su propuesta. Tras el bis “King of confussion” llegaría el delirio con “Whota lotta love”, el clásico de los Zeppelin, que para la gran mayoría significaba el cierre de esta jornada.


JOHN MAYALL:

El legendario “frontman” de los Bluesbreakers venía de tocar un día antes en Estados Unidos y por ello se le encajó el último del día (apareciendo a la 1’35 h) en este segundo día de Festival. No decepcionó pero tampoco sorprendió, hizo lo que mejor sabe hacer, tocar blues propios y ajenos con la ayuda del guitarrista zurdo Coco Montoya, entre otros. Hasta casi las 3 de la madrugada estuvo presentando alguno de los nuevos temas de su disco “Outnow”. La lluvia que había respetado estoicamente otros conciertos finalmente cayó durante el número final, “Road to move”. Unas 30.000 personas habían pasado por el Estadio Riazor durante esta jornada.

SABADO, 10 DE JULIO DE 1993

ERIC BURDON & BRIAN AUGER:

Parte del público allí presente parecía desconocer que el cantante que abría el tercer y último día del Festival era el ex-líder del mítico grupo The Animals, acompañado además por toda una leyenda del órgano Hammond, Brian Auger y de su propia banda. Hasta que Eric Burdon no tocó “The house of the rising sun” no recibió la respuesta deseada. Finalmente convenció y el público incluso le pidió un bis.



BO DIDDLEY:

Un Bo Diddley de 64 años apareció con un frac blanco y una guitarra rectangular cuando aún no había anochecido, con una banda de cuatro músicos y en apenas una hora de actuación dio toda una lección de rock con temas como “Manish boy”, “Spanish guitar” o “Who do you love”.


WILSON PICKETT:

Al igual que a George Benson le tocaba la difícil papeleta de sustituir al primer artista en el que se pensó, ni más ni menos que el padre del soul, James Brown. Wilson Pickett venía acompañado por una amplia banda de siete músicos (tres de ellos integrando la sección de viento) que hicieron animar al personal con canciones tan conocidas como “Mustang Sally”, “In the midnight hour” o “My girl”. La impecable voz de Pickett fue de lo más comentado del día.


JERRY LEE LEWIS:

Hizo de las suyas, cuando llevaba un rato tocando tuvo un arranque de furia y le dio un patadón a un cámara que le estaba filmando, este gesto enfureció al público que no paró de silbarle a pesar de que The Killer interpretara clásicos de la talla de “Long tall Sally” o “Whole lotta shakin’ goin on”. Habiendo tocado tan solo 40 minutos salió del escenario cabreado soltando un simple “buenas noches”.


CHUCK BERRY:

La vieja leyenda del rock puso el broche de oro al Festival, después del incidente con Jerry Lee Lewis el público le recibió con más ganas sí cabe. Toco temas legendarios como “School day”, “Memphis Tennesse”, “You never can tell me” o “Dime mama porque”, cantada completamente en español. Fue probablemente junto a Dylan, uno de los artistas que menos se relacionó con el resto. En 2008 un Berry ya octogenario canceló sin previo aviso dos actuaciones en Málaga y León por las que ya había cobrado. Pocos meses antes sí habían podido verle tocando en Tenerife. A sus 85 años sigue dando frecuentes actuaciones en el Blueberry Hill’s Duck Room de St. Louis. 30.000 espectadores disfrutaron del último día de un concierto sin duda inolvidable que por alguna extraña razón ha caído prácticamente en el olvido, “El concierto de los 1.000 años”.

Hoy en día de repetirse el concierto se llamaría “El concierto de los 2.000 años” porque sus participantes suman ya muchos más años: Chris Isaak (56) George Benson (69), Neil Young (65), Booker T. Jones (66), Steve Cropper (70), Sting (60), Ray Davies (68) Dave Davies (65), Bob Dylan (71), Robert Plant (63), John Mayall (78), Eric Burdon (71), Brian Auger (72), Jerry Lee Lewis (76) y Chuck Berry (85).
   

NOTA:

Y para los más curiosos os dire que el setlist del concierto de Sting fue el siguiente:

If I ever lose my faith in you / Driven to tears / Love is stronger than justice / A day in the life / Fields of gold / Synchronicity II / Every little thing she does is magic / Roxanne / It’s probably me-Sister Moon / Shape of my heart / Saint Augustine in hell-Straight to my heart / King of pain / All this time / Englishman in New York / Bring on the night-When the world is running down // Fragile.

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