Por Joan Navas
Después de “Ten summoner´s tales” (1993), Sting necesitaba ése equilibrio de paz y sosiego. Lejos quedaba ya la banda The Police que le sirvió de escuela y aprendizaje, estaba trabajando para su quinto trabajo, el más reflexivo de todos: “Mercury Falling”.
Grabado en Lake House en 1995, producido nuevamente por el mismo Sting junto al británico Hugh Padgham, quien prácticamente, le ha acompañado en toda su andadura en solitario. Hugh fue decisivo para evidenciar y sacar (esta vez) a la luz la reflexión, pensamientos y meditaciones que Sting tenía. Hugh Padgham, en una encuesta de 1992 en la revista Mix, fue votado como uno de los diez productores más influyentes del mundo. Y es que fue el ingeniero y produjo trabajos para Genesis (además de Phil Collins y Peter Gabriel), David Bowie, Brian Wilson, Youssou N´Dour, The Lightyears, Bee Gees…
Hugh era un viejo amigo de Sting, pues había sido co-productor en dos álbumes de The Police: “Ghost in the machine” (1981) y en el alabado mejor trabajo de la banda: “Synchronicity” (1983). El ingeniero de sonido fue el propio Hugh (quien además fue el ingeniero de mezclas) junto con Simon Osborne.
Sting además fue el bajista del álbum que contó para la grabación con la siguiente banda: Dominic Miller a las guitarras, Kenny Kirkland a los teclados y Vinnie Colaiuta a la batería. Además contó la inestimable ayuda de: Branford Marsalis y Andrew Love al saxófón, Gerry Richardson al órgano Hammond en la canción “Let your soul be your pilot”, Katherine Tickell el violín, Wayne Jackson a la trompeta, BJ Cole al pedal Steel, Monica Reed Price, Tony Walters, Lance Ellington, Shirley Lewis y The East London Gospel Choir pusieron las voces.
Sting, como devoto practicante de yoga, creaba el álbum en equilibrio con la soledad, las melancolías, las nostalgias, los miedos, los recuerdos, influenciado musicalmente por diversas culturas y épocas así como lo afirmaba en una entrevista para la revista Time: “Estoy interesado en la mejora de música pura”. De esta forma, en marzo de 1996 sale al mercado el quinto álbum de estudio bajo el título: “Mercury falling” (A&M Records, Inc.), con una portada en primer plano de Sting y fotografías hogareñas en blanco y negro, recordando a los años sesenta, no sólo por los retratos sino por el trato en la grabación de las canciones recordando a los FAME Studios (fueron y son unos estudios de grabación situados en Alabama, que fueron claves en la música popular estadounidense de la década de los ´50 hasta la actualidad; Wilson Pickett, Aretha Franklin, Otis Redding, Joe Tex, Paul Anka o Tom Jones son algunos de los artistas que grabaron en dichos estudios).
El disco se compone de once hermosas canciones - todas escritas y compuestas por el propio autor, excepto una que la detallaré -, cuyo tema: “Twenty five to midnight” fue excluido de las versiones americanas y canadienses, ya que estaba incluido en el CD-Maxi Single de “You still touch me”. “Mercury falling” incluye las siguientes canciones:
01. THE HOUNDS OF WINTER
La primera canción empieza con unos redobles para introducir esta hermosa composición. Con una letra en castellano que nos dice con nostalgia y melancolía: “El mercurio cae. Me levanto de mi cama a recoger mis pensamientos. Tengo que mantener mi cabeza, parece que ella se ha ido y de alguna manera estoy clavado por los sabuesos del invierno. Aullando en el viento”. Sting se encuentra en una soledad desconcertante: “Busco a mi compañera. Tengo que secar mis lágrimas. Parece que ella se ha ido y me dejó demasiado pronto. Soy tan oscuro como diciembre, estoy tan frío como el hombre en la luna.”
Ya desde el primer tema escuchamos a un Sting lejos de la rebeldía de su juventud con la banda que lideraba junto a Andy Summers y Stewart Copeland, aquel Sting ha crecido y se ha hecho mayor, perfilando cada nota musical y perfeccionando su abanico musical. La canción finaliza con los mismos redobles que en la introducción.
02. I HUNG MY HEAD
Una bella guitarra eléctrica abraza una canción que como de un cuento se tratara, nos explica sobre los peligros del uso de armas irresponsablemente, cuando a un hombre se le disparó accidentalmente una matando a una persona y fue condenado por ello a la horca: “Me puse a correr para despertar del sueño, el fusil de mi hermano cayó en el arroyo. Yo seguí corriendo en las tierras de la sal y ahí es donde me encontraron con la cabeza entre mis manos, el Sheriff me preguntó: ¿Por qué había corrido? Entonces me di cuenta de lo que había hecho y todo sin ninguna razón.”
03. LET YOUR SOUL BE YOUR PILOT
Fue el primer sencillo. Es una oda del evangelio orientada a la esperanza, la fe y crecimiento personal: “Deja que tu dolor sea mi dolor, deja que tus lágrimas sean mis lágrimas y también deja que tú valor sea mi modelo. El Norte que encuentres será el verdadero cuando no hay más que información inútil y la brújula señala hacia ninguna parte, que tú conoces bien”.
Preciosos saxofones de Branford Marsalis, Andrew Love y la trompeta de Wayne Jackson dando elegancia a la canción además de las voces en gospel de The East London Gospel Choir.
04. I WAS BROUGHT TO MY SENSES
Preciosa canción con un Sting relajado, acompañado de una guitarra acústica y un violín prudentes y cautelosos. Luego la canción emprende el vuelo con una melodía nutrida con influencias jazzísticas con variedad de instrumentos: percusión, saxofón, más guitarras, bajo... Con una letra entorno a la realización del amor en la vida de una persona: “Para entonces, sin ninguna razón los dos pájaros se alzaron el vuelo. Y mientras los pájaros volaban, juro que me vi contigo, juro que me vi contigo”.
05. YOU STILL TOUCH ME
Otra de las canciones más bellas de Sting, fusionando estilos musicales, cuya letra nos habla de los miedos y temores del desamor narrados poéticamente: “Otra noche me encuentro solo en mis sueños. Todavía me importas, tu foto junto a mi teléfono. Con esa sonrisa todavía me emocionas”. “En mis pesadillas tú todavía me abrazas”. “Me parece escuchar las gotas de lluvia diciendo que no vas a volver, aún me importas”.
06. I´M SO HAPPY I CAN´T STOP CRYING
Esta composición cuya traducción significa: “Estoy tan feliz que no puedo dejar de llorar”, tiene en su totalidad un ritmo country y nos habla del divorcio y la custodia compartida: “Estoy tan feliz que me estoy riendo a través de mis lágrimas .Vi a mi abogado, el Sr. Buenas noticias. Él me consiguió la custodia compartida y la separación legal.”
07. ALL YOUR SEASONS
Nuevamente el pop elegante, lleno de swing, abarca otra magnífica composición.
08. TWENTY FIVE TO MIDNIGHT
Esta composición soul me recuerda al sonido Motown, sello discográfico cuyo estudio de grabación fue de gran influencia para la música pop y R&B de la década de los años sesenta. Esta es una canción influenciada seguramente por Ray Charles o Marvin Gaye entre otros.
09. LA BELLE DAME SANS REGRETS
Es la única canción del álbum que Sting ha escrito, arreglado y compuesto junto con Dominic Miller. Una canción en francés, con metáforas traducido al castellano como “La bella dama sin remordimientos.” Escuchamos a un Sting elegante, en una sonoridad musical distinta hasta entonces, con una bella melodía parisina, de exquisito piano y ritmos sublimes. Una letra dedicada a ésa mujer y ese amor incomprendido: “Yo lloro, te ríes. Yo canto, tú gritas”.
10. VALPARAISO
Ritmos celtas a cargo de Katherine Tickell, a través de una encantadora canción, dedicada a una musa marinera. Maravilloso toque de la guitarra española, y espléndida armonía, tratada con influencias irlandesas. Esta canción fue utilizada durante los créditos finales de la película “Tormenta Blanca”, dirigida por Ridley Scott en 1996.
11. LITHIUM SUNSET
“Sana mi alma oh atardecer de litio, y cabalgaré sobre el rodante mundo hacía una noche más”. Me parece otra composición maravillosa, donde nos habla de un narrador moribundo que ve la luz del sol y se siente despojado de todo dolor y sufrimiento.
Como curiosidad, el álbum comienza y termina con las palabras: “Mercury falling” (ver caer el mercurio). Estuvo nominado en los premios Grammy del año 1997 como Mejor Álbum Vocal Pop y también nominado por la canción “Let your soul be your pilot” como mejor interpretación Vocal Pop Masculino.
Aunque “Mercury falling” no fue muy entendido por los críticos musicales porque huye de modas, se aleja de lo comercial y carece de auténticos éxitos, este trabajo ecléctico invita a la reflexión reuniendo un conjunto de temas vitales, emocionales y existenciales creando un sonido personal a través de la pasión musical, creándolo sólo por muy pocos genios, uno de ellos es sin lugar a dudas: Sting.
En definitiva, este quinto trabajo, está a la altura de los álbumes intimistas y personales de muchísimos cantautores, como por ejemplo: Paul McCartney en “McCartney” (1970), Bruce Springsteen en “Human Touch” (1992), Phil Collins con su “Both Sides” (1993), Peter Gabriel en “Us” (1992), Richard Ashcroft con “Human Conditions” (2002) o Mark Knopfler con “Shangri-la” (2004).
Aprovecho la ocasión para enviar un saludo muy cariñoso a todos y cada uno de los lectores de “Todo Sobre Sting” a cuya publicación la cedo muy amablemente porque comparto con Kasker la afinidad y pasión por Sting.
¡Fortuna y salud!
Joan Navas, octubre de 2012.
ACERCA DE JOAN NAVAS
Obras poéticas:
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ALAS EN EL OLVIDO (2004)
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EL ASFALTO DE LAS DUDAS (Y LAS DEUDAS DE ASALTO) (2004)
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CUERPO (2005)
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EVELYN (2008)
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EL DESCONOCIDO VIAJE DE UN POETA ENAMORADO (2010)
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LA SILUETA DE LA TRISTEZA (2012)
Actualmente está colaborando semanalmente en kaosenlared, un medio alternativo de información que se publica sólo en Internet (http://www.kaosenlared.net/), como crítico musical, entrevistando a artistas como John Parsons, Mojinos Escozíos, Alan Boguslavsky, Pedro Javier González, Antonio Fidel, José Manuel Casañ (Seguridad Social), Rafa Montañana, Juan Carlos García...
